Se usa cuando alguien se arma de valor y se lanza a hacer algo arriesgado, incómodo o medio imprudente, ya sea por valentía o por pura necedad. Es como decir que se fajó y se aventó al ruedo, aunque igual y no era la mejor idea. Y la neta es que suena bien chido cuando alguien sí se pone la teca.
"No manches, el Chuy sí se puso la teca, se brincó la barda del estadio, se metió a la cancha y hasta se tomó selfie con el portero antes de que lo sacaran los polis"