Se dice cuando aparece un chisme bien jugoso, de esos que empiezan en una esquina y en dos minutos ya lo sabe medio Cusco. La idea es que la noticia rueda de boca en boca y se va agrandando con cada persona que la cuenta. Sirve para comentar el salseo con picardía y curiosidad.
"En la fiesta de anoche salió una rueda brava y ya en la mañana mi tía estaba llamando a todos, como si fuera noticiero, para contar el chisme completito."