Se dice con ironía de la persona que se la pasa chamuyando en el bar, tirando historias épicas y promesas grandotas, pero a la hora de hacer, cero. Mucha lengua, poca acción. Es el típico que con dos tragos ya “conquistó el mundo”, pero después no mueve ni un dedo. Y encima te lo cuenta convencidísimo.

"Ahí tenés a Ricardo, orador de cantina total: hace media hora que dice que va a subir el Aconcagua y después no camina ni hasta el kiosco."

¿Te gusta nuestro diccionario?

Además de rebuscar expresiones cañoneras, también contamos chistesitos.

Échale un ojo, si no te ríes en 10 segundos, te hacemos un descuento.

Tu cesta: 0,00 € (0 productos)
Imagen del producto

Tu Carrito de Magia

Tu carrito está vacío. ¡Adopta un Magikito!