En Mérida se usa para hablar de cuando alguien anda coqueteando duro, echando todo el encanto para ligar. Es como aventar chispas de seducción por todos lados, con miraditas, halagos y hasta show incluido. No es algo serio ni formal, más bien un jueguito de ligue que a veces funciona y a veces da pura risa.
"No manches, viste a la Gaby en el antro, andaba tirando polvito a medio mundo, hasta al DJ le guiñó el ojo y le pidió reguetón bien pegadito"