Se dice cuando alguien agarra una idea para cualquier lado y entiende todo al revés, como si le entrara la info por la oreja equivocada. Es ese momento en que sacás una conclusión rarísima y el resto se queda mirándote tipo: ¿de dónde sacaste eso? Muy de charla cotidiana, con humor y un toque de burla.
"Le dije que llegaba a las ocho y cayó al mediodía con bizcochos. Encima se enoja y dice que yo lo confundí. Bo, tomó pa'l lado del martillo otra vez."