Se dice cuando se arma una fiesta o un plan con bulla que se va de las manos para bien: música alta, gente por todos lados, relajo, ron y pura gozadera. Es como decir que aquello estuvo intenso y memorable, de los que al otro día te dejan sin voz y con historias para rato.
"Fuimos al malecón dizque un ratico y se armó tremenda jarana: bocina a tope, ron pasando de mano en mano y hasta el vecino serio terminó bailando."