Se dice cuando andas medio curado, mareado o con la caña encima después de carretear. No es que estés destruido nivel hospital, pero sí lo justo para caminar raro, hablar lento y mirar el mundo como en 240p. Muy de después de un asado largo con chelas y su pisco. Y sí, da risa hasta que te toca.
"Ayer me fui al asado con los cabros y terminamos cantando a grito pelado. Hoy llegué a la pega y ando jurado, tomando agüita como loco pa’ que no me cachen."