Expresión muy usada en Lara para decir que alguien está en la quiebra total, sin un bolívar ni para un cafecito. Es como admitir que la cuenta está en números rojos y que cualquier gasto duele. Suena graciosa, pero cuando la sueltas normalmente es porque la cosa está seria, aunque uno se ría para no llorar.
"Chamo, ni me invites pa' la rumba, que este mes ando más pelado que rodilla de chivo desde que pagué la luz, el agua y hasta la empanada fiada de la esquina."