En Trujillo se le dice causa relámpago al pata que cae a la reu de la nada, saluda a todo el mundo, se luce un ratito y se desaparece más rápido que la propina a fin de mes. Es ese amigo que siempre hace entradas y salidas triunfales, y aunque se quede poco, igual deja su huella. Y hay que admitir que tiene su estilo.
"Mano, el Chato es un causa relámpago, cayó a la jato, se bajó dos chelas, se tomó mil fotos pa' la historia y cuando fui a buscarlo ya se había esfumado del tono."