En Guatemala, un cebollazo es un piropo exagerado o una echada de flores bien cargada, de esas que suenan a halago con esteroides. Se usa para quedar bien, levantarle el ánimo a alguien o hasta para sacar algo a cambio, tipo hacer la barba. Puede ser sincero o puro cuento, pero siempre va con gracia.
"Ahí viene Juanito, voy a tirarle un cebollazo: vos sos más pilas que el Chapulín Colorado, mano, hasta me das cátedra."