En Piura, decorar es exagerar los halagos a alguien, echarle flores a lo bestia, como si tuvieras un vivero en la lengua. Es cuando adornas tanto lo que dices que ya nadie sabe si hablas en serio o solo estás chamullando bonito. Y hay que admitir que cuando decoran bien, hasta provoca aplaudir.
"Oe causa, ya deja de decorar a la profe, parece que le estuvieras sembrando rosales en plena clase solo para que te suba la nota."