Se usa en plan cachondeo para decir que alguien se ha olvidado algo importante justo al final, cuando ya estaba todo listo. La gracia está en que suena medio picante y exagerado, como si te olvidaras literalmente la tanga. Sirve para reírse de esos despistes épicos que te dejan con cara de meme, y hay que admitir que la imagen mental es buenísima.
"Hermano, la Yessenia se fue a la playa toda apurada y llegando se dio cuenta de que se dejó la tanga en la casa, con bloqueador, plata y hasta el DNI, qué bestia"