Verbo bien fiestero para decir que te vas a pegar una parranda sin freno. Es salir a beber, bailar, cantar y alargar la noche hasta que el cuerpo diga basta. Se usa cuando el plan no es una cervecita tranquila, sino desorden sabroso, música a todo volumen y amanecer con ojeras.
"Este finde nos vamos a emparrandar en la finca de Juanito, lleve guaro y parlante porque eso se va a prender duro y los vecinos van a quedar bravos."