Se dice de alguien que anda en la luna, despistado o desconectado de lo que está pasando, como si estuviera metido en su burbuja y no cachara nada. En Mérida lo sueltan cuando alguien no agarra la onda, se queda ido o responde cualquier cosa. Vamos, que su mente se fue de paseo y dejó el cuerpo aquí.
"Juan llegó tardísimo y la profe: ¿y ahora qué? Y él nomás se quedó viendo al techo, todo ido. No, profe, perdón, estaba en la tribi."