En Guinea Ecuatorial llamar a alguien torre es decir que va de sobrado, que se cree la gran cosa y se mira por encima del hombro a los demás. Es como si fuera un rascacielos andante, pero en realidad da más risa que respeto. Es esa peña que se infla sola y al final queda bastante ridícula, aunque ellos ni se enteran.
"Ese Manolo desde que le subieron el sueldo va por el barrio hecho torre, caminando despacio como ministro, pero sigue debiendo la luz y el wifi desde hace tres meses"