Se dice cuando alguien se suelta a hablar y ya no hay quien lo pare, sobre todo si empieza a largar chismes, secretos o verdades que estaban guardaditas. Es como abrir la canilla de la lengua y que salga todo de golpe. En ronda de tereré suele pasar, y después nadie se hace cargo.
"En el tereré de la tarde, Marta largó la lengua y tiró el chisme completo: quién se peleó, quién volvió y quién anda de novio a escondidas."