Se dice de alguien que parece gafado, como si la mala suerte lo persiguiera desde que nació. Todo le sale al revés, se le dañan las cosas, pierde plata o siempre le pasa algo. Es una forma bien paisa de exagerar el infortunio ajeno, con cariño o con recocha, según el tono.
"Parce, a ese man se le varó la moto, lo tumbaron con el vuelto y encima lo regañaron en la casa. Ese sí nació con las patas pa' arriba."