Expresión amazónica para decir que algo está bien oscuro, pero oscuro de verdad, como la piel de la charapa o el agua del río cuando ya no se ve nada. Se puede usar para color, ambiente o incluso para decir que algo está medio turbio. Y hay que admitir que suena bien pintoresca y sabrosa.
"Apaga esa luz, pe, que tu cuarto ya está negro como charapa, parece hueco de mapacho y ni encuentro mis sandalias."