Se dice cuando algo está exageradamente chido, impresionante o de plano bien perrón. Es como llevar el clásico padre a modo turbo, con todo y estrellitas. Sirve para cosas, planes o hasta gente que se rifó durísimo. Suena bien de barrio y bien orgulloso, de esos elogios que se avientan sin pena.
"No manches, tu compu quedó padrotadazo con esas luces, ya nomás falta que haga tortillas y nos vamos recio."