Se le dice a alguien que ya va pasadito de copas, medio mareado y con la alegría a tope. No es que esté tirado, más bien está en modo fiesta, hablando fuerte, riéndose de todo y haciendo papelones simpáticos. La gracia es la imagen del pescado fuera del agua, desubicado pero feliz.
"Roberto ya está pasao de pescao con tanto macerado, se subió a la silla y canta cumbia a todo pulmón, desafinadazo."