Se usa para decirle a alguien que ya vaya recogiendo sus cosas y se pire, normalmente porque ya ha dado bastante la chapa o se ha pasado de listo en una reunión, fiesta o lo que sea. Suena medio simpático, pero también es una forma fina de invitarte a desaparecer un rato. Y oye, a veces hace falta.
"Entre el karaoke chungo, los chistes malos y el vino peleón, al final le dijeron a Juanito que se recogiera los trastos y se largara a dormir la mona a su casa."