En Lima se usa para señalar a alguien que nunca se decide del todo, que se hace el interesado pero al final se corre o se baja del plan. Es esa persona que promete, promete y a la hora de la verdad se enfría y desaparece. No es malo, solo tibio, pero igual da una rabia que flipas cuando arruina planes.

"No invites a Martín al fulbito, es un tibiado, siempre arma el grupo, promete chelas y al final se hace humo y ni contesta el WhatsApp."

¿Te gusta nuestro diccionario?

Además de rebuscar expresiones cañoneras, también contamos chistesitos.

Échale un ojo, si no te ríes en 10 segundos, te hacemos un descuento.

Tu cesta: 0,00 € (0 productos)
Imagen del producto

Tu Carrito de Magia

Tu carrito está vacío. ¡Adopta un Magikito!