En Caldas se le dice veráquio a la persona que vive echando cuentos inflados, historias fantásticas y exageraciones que nadie serio se cree. Es como ese amigo que siempre tiene una anécdota más loca que la anterior y uno ya sabe que la mitad es puro adorno, pero igual entretiene un montón.
"Parce, no le coma tanto cuento a Martín, ese man es veráquio perdido, cada semana sale con otra historia de pescador más jalada de los pelos que la anterior."