Se usa para decir que alguien está bien menso o distraído, como si en vez de cerebro trajera puro aserrín en la cabeza. Es para esos compas que siempre la riegan, se les olvida todo o no cachan ni una. Suena medio carrilla, pero también tiene su gracia cuando lo dices entre amigos.
"No le pidas a Pancho que organice la carne asada, el vato trae puro aserrín en la cabeza y se le olvida hasta comprar la carne"