Dicho bien santandereano para cuando alguien se desmaya o se va al piso de golpe, como si le hubieran apagado el switch. Suele pasar por un susto, una impresión fuerte o porque le bajó la tensión. Es de esas frases que suenan chistosas, pero describen perfecto el momento en que uno queda tieso y pálido.
"Le dijeron que el lunes había reunión a las 6 a. m. y el man se puso blanco, se agarró de la silla y casi cae sapo ahí mismo."