Expresión que significa acompañar a alguien, especialmente en alguna actividad o aventura loca. Es como ser el compañero de batallas inesperadas.
"Oye causa, ¿me haces la taba para ir al concierto en Cusco este fin? Va a estar brutal."
Expresión que significa acompañar a alguien a algún lado, especialmente cuando no tienes nada mejor que hacer.
"Oe, ¿vas al centro? Te hago la taba para ver qué encontramos por ahí."
En Junín se usa para decir que vas a acompañar a alguien para que no esté solo, ya sea en un plan medio embolante o en una juntada donde hace falta banca moral. Es como ser el copiloto del quilombo, el que se suma para hacer aguante y que la situación sea más llevadera. Y la verdad, siempre viene bien alguien que te haga la taba.
"Che, mañana tengo que ir al cumple de mi ex con toda la familia, ¿me hacés la taba y venís conmigo así no quedo pintado al óleo?"
Expresión limeña que significa acompañar a alguien para que no esté solo, sobre todo en planes medio aburridos como clases eternas, reuniones pesadas o trámites que dan flojera. Es como hacerle el aguante, estar ahí de compinche para que la cosa se sienta menos densa. Y la verdad, con buena taba hasta la cola del banco se aguanta.
"Oye causa, ¿me haces la taba a la lectura del profe? Si vamos juntos nos matamos de risa atrás y ya no se siente tan monse la clase."
En Lima se usa para decir que acompañas a alguien, que le haces de compinche y no lo dejas solo ni a balas, incluso en planes medio pesados o incómodos. Es como ser su pata leal que se apunta a todo, aunque el plan sea más aburrido que cola de banco. Y hay que admitir que a veces salva la noche.
"Oye, mañana tengo reunión con mi jefe tóxico, hazme la taba pues, así por lo menos nos reímos de sus chistes malos después."
Acompañar a alguien, especialmente cuando no quieres o no tenías planes de hacerlo, pero lo haces porque, al fin y al cabo, eres buena gente.
"No quería ir a esa reunión aburridísima, pero ya pues, le hice la taba a mi causa para que no vaya solo."