En Áncash se usa para decir que alguien quedó sin salida, que la cagó feo o que ya no tiene cómo zafarse del problema. Es como aceptar la desgracia con resignación y un poco de humor negro. Suena fuerte, pero entre patas se suelta bastante, sobre todo cuando ya no queda más que reírse.

"Estaba copiando en el examen, el profe se paró atrás mío y me quitó la hoja. Solo pensé: ya me jodí, mi vieja me mata cuando vea la nota."

Formalmente significa fastidiarse o aguantarse algo sin poder cambiar la situación. En Mérida se usa cuando alguien metió la pata, perdió la oportunidad o simplemente le tocó aceptar la realidad sin chistar. Es como decir que ya no hay vuelta atrás y que toca apechugar, aunque duela. Y sí, suena fuerte, pero también tiene su gracia.

"¿Que no fuiste a comprar el pan porque estabas pegado viendo la serie? Bueno, mi pana, ahora te jodes y te lanzas unas arepas con lo que haya en la nevera."

¿Te gusta nuestro diccionario?

Además de rebuscar expresiones cañoneras, también contamos chistesitos.

Échale un ojo, si no te ríes en 10 segundos, te hacemos un descuento.

Tu cesta: 0,00 € (0 productos)
Imagen del producto

Tu Carrito de Magia

Tu carrito está vacío. ¡Adopta un Magikito!