Se usa cuando alguien se levanta a la re contra mañana y aun así aparece impecable, con toda la facha, como si recién saliera de una producción de fotos. Nada de ojeras ni cara de zombie, pura pinta y actitud. Es medio mito urbano, porque la mayoría madruga hecha bolsa, pero siempre hay algún bendecido que lo logra.
"Yo caigo al laburo con cara de lunes eterno y ojeras nivel panda, y la flaca de sistemas madruga con facha, rimel intacto y outfit listo para la tapa de revista."