En Chaco se usa para hablar de pegarse un buen baño, lavarse bien la cabeza y el cuerpo, como para sacarse hasta el último piojo imaginario. Es como decir que alguien se higienizó a fondo después de andar hecho un desastre. Suena medio bruto, pero tiene su gracia porque exagera a lo bestia lo sucio que estaba uno.
"Volvió del campamento todo transpirado y hecho bola de mugre, la vieja lo metió a la ducha y dijo que hoy sí le iba a matar la piojera de una vez por todas"