Se usa en Galicia para hablar de alguien que parece sacado del monte, medio salvaje, sin mucha educación social o con pintas muy dejadas. Puede ser por cómo habla, cómo se viste o cómo se comporta, como si no estuviera muy acostumbrado a la vida en la ciudad. A veces se dice con cariño, pero también puede ser un poco burla.
"Mira para Xoán, chega á voda cunha camiseta do Depor toda rota, o pelo sen peitear e as zapatillas cheas de lama, ese rapaz é moi do monte, nin que viñera directo da leira"