En Zulia se usa para hablar de andar por ahí sin rumbo, matando el tiempo, inventando planes que casi nunca se concretan o simplemente rascándote la vida sin hacer nada productivo. Es muy maracucho, muy de calle, y suele venir con regaño incluido. Y hay que admitir que suena sabroso aunque te estén jalando las orejas.
"Mirá vale, te fuiste desde la mañana a tambolear por el centro, llegaste sudado, sin plata y ni siquiera trajiste el kilo de harina que te mandé a comprar."