En Tucumán se usa para decir que alguien está muy sensible, caprichoso o exagerando por pavadas mínimas. Es esa persona que se queja por todo, se ofende fácil y arma novela por cualquier detalle. A veces suena medio infantil, como si tuviera mieditos o mañas, pero también tiene su gracia cuando lo usás para cargar a un amigo.
"Dejá de tener ñañas, boludo, si el bondi se fue recién, tomamos otro y de paso compramos unas empanadas tucumanas bien piolas."