En Áncash le dicen pata al amigo de confianza, al causa con el que tienes buena vibra y puedes rajar, vacilar y contarle tus dramas sin roche. Es como decir colega o brother, pero con sabor bien peruano. Si alguien es tu pata, es de tu círculo cercano y se nota en cómo se hablan.
"Oye pata, hoy día no chambeo, ¿jalamos a la playa con unas chelas antes que el tráfico se ponga más bravo que tu ex?"
Forma coloquial de referirse a un amigo o compañero, como quien siempre está a tu lado, literal y figuradamente.
"Voy al mercado con mi pata para comprar unos choclitos pa'l almuerzo."
Forma cariñosa y amistosa de referirse a un amigo o compañero, como decir ‘bro’ pero bien peruano.
"Oe, pata, ¿vamos por unas chelas después de la chamba?"
En Arequipa pata es tu amigo del alma, tu causa fiel, ese compa que está contigo en las buenas, en las malas y en las que ni te acuerdas. No es cualquier conocido, es casi de la familia y siempre entra al rescate cuando la vida se pone brava. Y hay que admitir que suena bien cariñoso.
"Mi pata es tan leal que dejó plantada a su flaca solo para venir a empujar mi carro viejo en plena subida a Sachaca, y encima trajo chelas."
En Perú, y en Piura se escucha un montón, pata es tu amigo, tu causa, tu compadre de confianza. Se usa para llamar a alguien con cariño y cercanía, como decir colega o bro, pero bien peruano. Vale para el de toda la vida o el que acabas de conocer y ya cayó bien.
"Pata, este finde hacemos ceviche con su chela heladita y después nos vamos a la playa a rajar un rato, ¿ya quedamos o qué?"
En Perú, sobre todo en Lima, pata es la forma clásica y bien callejera de decir amigo, colega o causa. Es como soltar un bro o un compa, pero en versión peruana. Sirve para saludar, pedir un favor o meter confianza sin sonar cursi. Si te dicen pata, ya estás en el grupo.
"Pata, apura pues, que ya empezó el partido y después nos vamos por unas chelas a la esquina, ¿ya?"
En Lima le dicen pata al amigo cercano, el causa de confianza con el que puedes rajar, vacilar, llorar tus penas y hasta hacer tus locuras sin roche. Es más que un simple amigo, es casi familia, pero con más chongo y menos sermones. Y hay que admitir que suena bien más chévere que decir solo amigo.
"Oe, mi pata el Tavo cayó con un asado brutal el domingo, todo el barrio terminó chupando en la azotea, qué paja, causa."
En Perú, pata es tu amigo del alma, ese con el que te vas a todas, desde el cole hasta la chamba y las juergas. Es como tu causa de confianza total, casi parte del mobiliario de tu vida. No es cualquier conocido, es el que te aguanta las locuras, los chismes y hasta las crisis existenciales sin hacerla larga.
"Mi pata cayó a la jato con chelas y pollo a la brasa justo cuando estaba misio y bajoneado, ese brother sí que nunca me abandona"
En Lima se usa pata para hablar de un amigo cercano, el causa de confianza con el que sales, rajes de la vida y te tomas unas chelas. Es como decir colega, pero con más cariño y calle. Suena relajado, buena onda y muy de barrio, y la verdad es que tiene un saborcito bien peruano.
"Oe, pata, cae a mi jato con unas chelas que vamos a ver el partido y rajar de la chamba hasta la medianoche"
En Perú, pata es la forma más clásica y cariñosa de decir amigo, colega de confianza, ese con el que compartes chisme, chelas y dramas existenciales. No es cualquier conocido, es tu causa, tu brother del barrio. Suena cercano, relajado y muy de calle, y hay que admitir que tiene un saborcito bien peruano.
"Oe, pata, hoy en la noche nos juntamos con los demás patas en la esquina para pelar a medio barrio y luego caer a la pollería"
En Perú, pata es tu amigo de confianza, tu causa, ese con el que te vas de juerga, rajas de todo y cuentas tus dramas sin roche. No es solo colega, es casi familia, el que siempre está al pie del cañón. Y seamos honestos, todos necesitamos aunque sea un buen pata en la vida.
"Mi pata cayó a la jato con chelas, pollo a la brasa y chisme fresco, así que armamos la reunión improvisada hasta las tantas de la noche"
En Trujillo se usa pata para hablar de un amigo cercano, tu causa de confianza, el compa con el que te vacilas siempre. A veces también se suelta para referirse al novio o a la pareja, según el tono y la confianza. Nada que ver con la pata del cuerpo, aunque igual da risa cuando alguien se confunde.
"Oye, ¿has visto a mi pata? Seguro se quedó jato después de la chela y ni se enteró que todos nos fuimos del tono hace rato."
En Iquitos, pata es tu amigo de confianza, tu causa, el que se apunta a todo sin hacerla larga. Se usa como “bro” o “compa”, bien de barrio y bien amazónico. Vale para saludar o para hablar de alguien cercano: mi pata, tu pata. Suena cálido y bien callejero, de esos que no fallan.
"Oe, pata, ¿hoy nos vamos al Nanay a pescar o te animas a un canopi? Pero no me vayas a plantar, ah."
En Arequipa le dices pata a tu amigo de confianza, ese con el que rajas, sales, te salvas de problemas y también te metes en otros peores. Es como decir causa, brother o pana, pero con sabor bien arequipeño. Suena cariñoso, cercano y un poco cómplice, como de sociedad secreta de patas de toda la vida.
"Oye pata, cae a mi jato con unas chelas, pedimos salchipapas y vemos qué hacemos con ese chongo del examen, que estamos más perdidos que turista en el Colca"
En Iquitos, pata es la forma más pana y relajada de decir amigo, causa o compadre de confianza. Es como decir bro, pero con sabor selvático y bien de barrio. Se usa para hablarle a tu gente cercana, esos con los que te vas de juerga, chismeas y compartes hasta el último sol. Y la verdad, suena bien chévere.
"Oye, pata, ¿qué dices si nos mandamos unas chelitas en la maloca esta tarde? Te tengo unos chismes más bravos que el calor de Iquitos."
En Loreto se usa para hablar del amigo del alma, el causa de confianza con el que te vas de juerga selvática, a comer ceviche bien picante o a perder la noción del tiempo a orillas del río. Es ese brother que aparece siempre que lo llamas, y hay que admitir que la palabra suena bien cariñosa.
"Oe, mi pata, cae al Malecón Itaya pa’ tomar unas chelitas bien helenas, comer juane y rajar de toda la gente de la selva hasta que amanezca"
Así le llamamos al amigo de toda la vida, ese compa que está en las buenas y en las malas. El 'pana' peruano.
"Oye, pata, ¿vas a venir al tono este finde o qué? Va a estar de la patada."
Término bien cariñoso y callejero para decir amigo, causa, compañero de mil batallas. Se usa con gente de mucha confianza, esos con los que rajas, sales, te salvas de líos y compartes todo. Si le dices pata a alguien es porque ya pasó la fase de conocido hace rato y es parte del círculo cercano.
"Ya pe, mi pata, deja de hacerte el loco y cáete a la esquina que el huarique está regalando chelas y cebichito como para resucitar muertos"
En Arequipa, pata es la forma más clásica y cariñosa de llamar a un amigo, tu causa de confianza, casi como decir bro pero con sabor arequipeño. Se usa para todo, desde invitar a unas chelas hasta rajar de la vida. Si alguien te dice pata, es porque ya estás dentro del círculo, no eres cualquier desconocido.
"Oye pata, hoy sí te vienes a la pichanga, después nos vamos por unas chelas al toque y seguimos la conversa hasta que amanezca"
En Moquegua pata es tu amigo cercano, tu causa de confianza, el que se apunta a todo plan sin hacer muchas preguntas. No tiene nada que ver con las piernas, es más bien ese pana que te acompaña en las buenas, en las malas y en las bien locas. Y hay que admitir que suena bastante cariñoso y callejero.
"Mi pata cayó a la casa con chelas, pollo a la brasa y hasta micrófono, y terminamos armando un karaoke más bravo que el del chifa de la esquina."
En Perú, pata es una forma bien callejera de decir amigo, causa o colega. Se suelta para hablarle con confianza a alguien de tu grupo, sin tanta formalidad. En Cusco se oye un montón, sobre todo entre patas de la chamba o del barrio. Es de esas palabras que te hacen sonar local al toque.
"Oe, pata, saliendo de la chamba nos vamos por una chicha y de paso vemos si alcanza pa’ un cuy, ¿ya?"
En la jerga peruana, pata es tu causa, tu brother, ese amigo de confianza con el que te vacilas, rajas de todo y compartes desde la pichanga hasta el menú de la esquina. No es cualquier conocido, es alguien de tu mancha con quien hay lealtad y buena vibra. Y la verdad, suena mucho más cariñoso que decir solo amigo.
"Oye, pata, hoy salgo temprano de la chamba, caes a mi jato y luego nos vamos a Barranco a tomar unas chelas y a ver si ligamos aunque sea un WhatsApp, pe."