Estar pasao a pescado
Se dice cuando alguien huele fuerte a sudor o a rancio, como con ese tufo a pescado que te pega en la nariz al tiro. Es una forma bien gráfica y medio pesada de decir que a la persona le falta ducha urgente. En Antofa calza perfecto por lo costero, y da risa, pero igual es bien directa.
"Oye, Juanito, aléjate un poco po, si venís pasao a pescado. Te fuiste del partido directo a la micro sin ducharte, ¿o qué?"
Estar más perdido que la tortilla en Antofagasta
Dicho para alguien que anda totalmente desorientado, sin cachar nada, como dando vueltas sin rumbo. Es una comparación absurda y bien norteña: una tortilla en Antofagasta no pinta mucho, así que la imagen queda chistosa. Sirve para retar con cariño a un amigo cuando se pierde hasta con Google Maps.
"Compadre, llevai diez minutos buscando el baño en el mall y estai preguntándole al guardia por la micro. Estai más perdido que la tortilla en Antofagasta, po."
Estai en la luna
Se le dice a alguien cuando anda volado, distraído o en su mundo, como si no estuviera pescando nada de lo que pasa alrededor. Es el típico reto cariñoso cuando el otro se queda pegado mirando al vacío y no cacha una. Suena bien chileno con ese estai, bien de conversa rápida.
"Oye, compadre, te hablé como cuatro veces y estai en la luna. Pásame la llave inglesa al tiro, que si no se me va a ir la paciencia."
Hacerla cortina
Se dice para pedir que alguien pare el show, baje el ritmo o corte una situación que ya se alargó demasiado y está agotando a todos. Es como un ya basta, pero con sabor nortino. Sirve para peleas tontas, discusiones eternas o cuando alguien se pone porfiado y no suelta el tema.
"Ya po, compadre, hazla cortina y deja de webear con la misma cuestión, si nadie te está pescando."
Buenos pa'l hueveo
En Antofa se dice de alguien que es seco para el hueveo: puro leseo, talla y perder el tiempo a propósito. No es necesariamente mala onda, más bien que viven webiando y se toman todo pa' la chacota en vez de ponerse serios. Sirve para retar con cariño o para reírse de la flojera ajena. Y sí, suele ser verdad.
"Oye, esos cabros son buenos pa'l hueveo, se supone que iban a estudiar y llevan dos horas tirándose una pelota de papel y cagándose de la risa."
Estar pa' la fruta
Se dice cuando quedas hecho bolsa, reventado o medio ido de la cabeza por el cansancio, el estrés o una mala noche. No es solo estar cansado, es estar al borde de apagarte como celular con 1% y sin cargador. En el norte se escucha harto y suena bien dramático, pero es real.
"Entre la pega, el taco y el calor de Antofa, quedé pa' la fruta. Si me hablai mucho, me reinicio como computador viejo."
Tirar pinta
En Antofagasta se dice cuando alguien se arregla o se pone la media pinta para lucirse y llamar la atención, como queriendo impresionar. Puede ser con buena onda, tipo andar fachero, o con un toque de burla si se pasó de show y quedó medio ridículo. Igual, a veces funciona y da envidia.
"Mira al Juan con la chaqueta brillante y los lentes de noche, salió a la esquina a tirar pinta y parece árbol de Navidad, po."
Pasar por el puente
En Antofagasta se dice cuando te toca comerte un trámite o una situación latera y pesada, de esas que sabes que te van a quitar tiempo y paciencia. Viene de la idea de cruzar el puente en hora punta, con taco y todo parado. No es drama épico, pero te deja chato igual.
"Hoy me tocó pasar por el puente para ir a la pega y quedé pegado en el taco, llegué tarde y más encima el jefe con cara de pocos amigos."
Ocuparse la pera
Se dice cuando alguien se empieza a pasar películas y se estresa por algo que todavía ni pasa. Es como preocuparse de más, armarse el drama en la cabeza y quedar con la pera ocupada pensando puras tonteras. En el norte se escucha harto, y sirve perfecto para bajar a tierra al que anda acelerado.
"Ya po, no te ocupís la pera, si la prueba es mañana y el profe ni cacha que existimos. Mejor vamos por un completo y después estudiamos piola."
Andar en ventolera
Se dice cuando alguien anda volado, distraído o medio perdido, como si el viento del desierto lo llevara pa’ cualquier lado. Sirve para retar con cariño o para tirar la talla cuando alguien no pesca, se le va la onda o está en otra. Bien del norte, con arena en los zapatos.
"Oye, te mandé el audio, te etiqueté y ni ahí. ¿Andai en ventolera o qué? Ponte las pilas que ya vamos tarde al carrete."
Ser una torre
En Antofagasta se dice de alguien que es altísimo, como un poste, y destaca en cualquier parte. Es bien del norte, con ese rollo minero de cosas gigantes y gente que parece hecha a escala industrial. No es insulto, más bien talla. Si te dicen torre, prepárate para agacharte en el micro.
"Oye, el Nico es una torre, po, se subió al micro y quedó doblado como acordeón. La señora le dijo que se sentara y ni así le cabían las patas."
Peñar la cabeza
Se dice cuando alguien está dándole demasiadas vueltas a algo, pensando y repensando hasta quedarse pegado. Es como estar rayado o preocupado, con la mente a mil y la cara de que el mundo se te viene encima. Muy de Antofa para decirte: ya po, suelta un poco la cabeza y respira.
"Ya po, ¿qué onda contigo? Te veo peñando la cabeza hace rato por la pega. Pégate un respiro, vamos por una chela y se te pasa."
Andar como ciruela
Dicho bien del norte chileno para cuando alguien anda apurado, estresado y con la cara apretada, como si se le hubiera arrugado el ánimo. Va entre la prisa y el mal genio, tipo que no está para bromas ni para que lo paren a conversar. Suena chistoso, pero describe perfecto ese modo supervivencia.
"No lo webíes ahora, si el Juan anda como ciruela con la presentación y todavía no imprime ni una lámina."
Andar con la pala
Se dice cuando alguien anda con harta plata, gastando como si no hubiera mañana. La idea es que tiene tanta que la junta con pala, como si estuviera paleando billetes. En Antofa se usa harto para el que se forró, pegó un buen negocio o le cayó una suerte loca. Da un poquito de envidia, no te voy a mentir.
"Desde que le salió la pega en la minera, el Tito anda con la pala, invitó completos pa' todos y se fue a vitrinear una camioneta como si nada."
Mover el tarro
Se dice cuando alguien tiene que pensar un poco más, usar la cabeza o ponerse creativo para resolver algo. Es como un empujoncito amistoso de: dale, no seas pajero, razona. El tarro es la cabeza, obvio, y moverlo es activar el cerebro antes de mandarte una cagá.
"Cacha, compadre, mueve el tarro un poquito antes de tirarte con todas tus lucas al Colo-Colo, que después andai llorando y pidiendo prestado."
Pintura
En Antofagasta se le dice pintura a la persona que anda demasiado producida, sobre todo con maquillaje, como si se hubiera pintado con brocha gorda. Va para cuando alguien se pasó de rosca arreglándose y queda medio artificial o exagerado. Se usa en talla, con cariño o con maldad, según el tono. Igual da risa.
"Oye, mira la pintura que cayó al carrete, si le tirai una gota de agua se le corre todo y queda la escoba."
Andar a lo árbol
Se dice de alguien que anda sin hacer nada útil, medio pegado, como plantado y mirando la vida pasar. Es esa mezcla de flojera y cero iniciativa, como si fueras un árbol decorativo en la esquina. En Antofa suena bien para retar con humor a quien se queda puro dando vueltas sin moverse.
"Oye, Héctor, dejai la cagá, llevai horas andando a lo árbol en el living. Pégate la movía y acompáñame a comprar pan, po."
Estar al horno
Se usa cuando alguien está metido en un cacho de problema, complicado y con pocas salidas, como cuando la cosa ya se quemó en el horno y no hay cómo salvarla. Es estar en aprietos serios, con la soga al cuello y cara de no saber qué hacer. Y hay que admitir que suena chistoso aunque estés frito.
"Cuando vio al profe entrar con una pila de pruebas sorpresa y él sin estudiar ni una página, cachó al tiro que estaba al horno pero mal."
Carrete en la cesta
Dicho bien del norte chileno para hablar de un carrete improvisado, casi siempre al aire libre, típico de playa o mirador. La idea es simple: cada quien llega con algo en la mochila o en la famosa “cesta” y se arma la junta con música, chelas y picoteo. Plan barato, apañador y bien apañado.
"Ya, nos juntamos en el carrete en la cesta atrás del muelle. Tú trae las chelas y yo caigo con empanadas, parlante y harta buena onda, que la noche está filete."
Inclinar la petaca
Se dice cuando alguien ya le está dando duro al copete o anda con ganas de seguir, como que la petaca se le inclina sola. Puede ser que ya esté medio prendido o que vaya derechito a curarse. Es bien del norte y suena a advertencia con talla, antes de que quede hablando puras leseras.
"Compadre, te caché inclinar la petaca otra vez. Suelta el vaso un rato, que después andai cantando como tenor y ni te acordai cómo llegaste a la casa."