¡Eso es garantía, mijo!
Expresión muy usada en Bolívar para decir que algo es de confianza total, que no falla y que siempre responde. Se aplica a comida, favores, negocios o hasta a un amigo que nunca queda mal. Cuando alguien suelta eso es garantía, mijo básicamente te está diciendo que te lances sin miedo, que ahí no hay pierde y todo va a salir fino.
"Pilla donde vas a mandar a arreglar la moto, ve donde el Negro Rafa, eso es garantía, mijo, te la deja como nueva y hasta te echa el cuento mientras te tomas una Pony"
Jalamecates
Se usa para señalar a la persona que vive adulando a los jefes o a quien tenga poder, con la esperanza de sacar ventaja. Es el típico que ríe todos los chistes malos, se ofrece para todo y nunca lleva la contraria. Vamos, un lamebotas profesional que da un poco de vergüencita ajena cuando se pasa de zalamero.
"Ese Pedro es tremendo jalamecates, apenas ve al jefe se le pega como chicle, le celebra hasta los chistes malos y hasta le carga el maletín con tal de que lo tengan en cuenta para el ascenso."
Echarle coco
En Bolívar se dice echarle coco cuando alguien se pone a pensar bien las cosas, a usar la cabeza de verdad y no ir a lo loco. Es como decir que te esfuerces en analizar, planear o estudiar algo con juicio. Suena relajado, costeño total, pero el mensaje es claro: piensa antes de embarrarla, que el coco no es solo de adorno.
"Hermano, si vas a montar ese negocio en el mercado, échale coco a los números primero, que después no andes llorando porque te quedaste sin un peso."
Sapoetear
Acción de contar todos los chismes sin que te lo pidan; eso sí, siempre añadiendo un toque personal.
"Esa Maritza se la pasa sapoeteando tanto que me enteré de lo de Jairo antes que él mismo."
Comerse un taco
No se trata de comer un taco de comida, sino de enfrentar una situación inesperada o incómoda que te deja sin palabras.
"En la fiesta, cuando le preguntaron por su ex, Pedro se comió un taco y se quedó sin saber qué decir."
Tener la película armada
En Bolívar se usa para decir que alguien ya tiene todo planeado, calculado y bajo control, como si su vida fuera una peli que ya sabe cómo va a terminar. También puede ser que la persona se crea mucho el cuento y ande con toda la película montada en la cabeza. Y hay que admitir que suena bastante cinematográfica.
"Mira a Laura, ya tiene la película armada: dejó al novio, se va pa' Cartagena, va a montar hostal y según ella en un año está viajando por el mundo sin joder con jefes."
Dale directo
Se dice para empujar a alguien a que haga algo de una, sin tanta vuelta ni drama. Es como: ve al grano, arranca ya, no te enredes. En la Costa Caribe suena bien natural, con ese tono mandón pero parchado. Sirve para decisiones, favores, planes y hasta pa’ encarar a alguien sin miedo.
"Oye, compa, deja la vuelta y dale directo al negocio, que el man ya está esperando y se nos enfría el plan."
Echarle carrera
Expresión costeña para lanzar un pique de velocidad y ver quién corre más rápido. Es un reto relajado, casi siempre entre panas, muchas veces después de comer o en plena recocha en la calle o en la playa. No es cosa seria de atletas, es más para vacilarse al que se queda atrás y echar cuento después, que eso sí nunca falta.
"Estábamos en la playa en pleno guayabo, comiendo arepa e’ huevo, y a Pedro le dio por echarle carrera hasta la orilla. Salimos todos embalados y al final el man se quedó sin aire a mitad de camino, muerto de la risa y pidiendo agua."
Estar en la nube
Se usa para decir que alguien está todo distraído, como ido, pensando en cualquier cosa menos en lo que pasa alrededor. Es esa persona que mira al infinito mientras todos corren a coger el bus. No es insulto grave, más bien un jalón de orejas cariñoso. Y la verdad, a veces estar en la nube también se siente sabroso.
"Parce, estabas tan en la nube que casi te deja el bus de las seis, todo el mundo corriendo y vos ahí pegado mirando las palomas en la plaza como si fueran Netflix."
Echarle un galón
En Bolívar se dice cuando toca meterle más ganas a algo, apretar el paso y ponerle energía extra para que salga bien. Es como echarle gasolina a la cosa para que arranque de una vez. Sirve para trabajo, estudio, un plan o lo que sea. Suena bien costeño y bien directo, sin tanta vuelta.
"Oye, si vamos a sacar ese proyecto hoy, toca echarle un galón: apaga el chisme, pon música y nos vamos de una, que el jefe ya está encima."
Hacer puente
Se usa cuando alguien se agarra un día libre pegado a un festivo para armarse un fin de semana largo y sabroso. Puede ser el día antes o el día después, la cosa es alargar el descanso y desaparecer del mapa laboral o estudiantil. En Colombia es casi deporte nacional, y en la Costa más de uno se lo toma muy en serio.
"Ve, mija, yo mañana no voy pa' la oficina, voy a hacer puente y me voy pa' la playita en Tolú a tomarme unas frías con los panas."
Andar en flamenco
Se dice cuando andas reventado, sin energía, como si el cuerpo ya no diera más. Es esa sensación de ir arrastrando los pies después de una jornada pesada, con calor, trabajo y cero ganas de nada. No es que estés bailando sevillanas, es que vas hecho polvo y se te nota en la cara.
"Parce, después de la mudanza y subir la nevera por las escaleras, quedé andando en flamenco, ni pa' una pola me da."
Solazo
Se dice cuando pega un sol durísimo, de esos que te derriten la paciencia y te dejan sudando hasta las ideas. Es el típico calor de mediodía que te obliga a buscar sombra, abanico o lo que sea para sobrevivir. En la Costa lo sueltan mucho para exagerar el bochorno. Y sí, quema sabroso.
"Parce, hoy hay un solazo en la playa que ni el raspao me salva. Me vine sin bloqueador y ya voy rojo, parezco un camarón dando vueltas por Bocagrande."
Estar mamao
En Bolívar se dice estar mamao cuando alguien está cansado, aburrido o harto de una situación, de una persona o de un problema que ya se volvió insoportable. Es como decir que ya no aguanta ni un poquito más y que está a nada de explotar o mandar todo al carajo. Suena fuerte, pero también tiene su toque gracioso y muy costeño.
"Hermano, llevo tres horas haciendo fila en el banco y todavía falta la mitad, ya estoy mamao de este mierdero, mejor me voy pa' la casa a dormir la siesta."
Valiente como el gallo giro
Se dice de alguien que se atreve a todo, incluso cuando no está en posición de salir bien parado. Puede ser un héroe local o simplemente imprudente.
"Ese Chucho se metió al río con una sábana sin saber nadar; sí pues, valiente como el gallo giro."
Saladito
Se usa para decir que alguien está de mala suerte constante, como si todo le saliera torcido y tuviera una nube negra pegada encima. Es una forma medio burlona pero también cariñosa de comentar que a esa persona siempre le pasa algo. Y hay que admitir que a veces da risa cómo se acumulan las desgracias pequeñas.
"Hermano, a Juan le robaron el celular, se le dañó la moto y se le fue la luz en la casa, ese man sí está saladito de verdad."
Echarle machete
Se utiliza cuando alguien va a abordar un problema o trabajo de manera directa y con mucha energía. No implica violencia literal.
"Mañana toca echarle machete al proyecto para terminarlo antes del finde. ¡Vamos con toda la actitud, parcero!"
Vereda
En Bolívar se usa vereda para hablar de una salida corta y medio improvisada, casi siempre para pasarla bueno y despejar la cabeza. No es la vereda de caminar, sino más bien una escapadita con plan de risa, trago, río o lo que salga. Suena inocente, pero casi siempre lleva su toque de desorden sabroso.
"Mi tía juró que iba a misa, y cuando la llamamos estaba era pegándose tremenda vereda en la playita con las amigas, tomando pola y bailando champeta como si tuviera quince."
Tener hierba de toro
Se dice de alguien que tiene una energía brutal, aguante infinito o una fuerza que no es normal. Vamos, que no se cansa ni a palo y siempre está listo para otra vuelta, otra rumba o lo que sea. Suele soltarse con admiración y un puntito de envidia, porque esa pila no la regalan en ninguna parte.
"Carlos salió de la rumba a las cinco, se metió un caldo y todavía se fue a trotar al parque. Ese man tiene hierba de toro, no joda."
Prestar la oreja
Expresión que significa escuchar con atención, especialmente para enterarse de algún chisme o novedad jugosa.
"Ayer en la plaza empezaron a hablar sobre el romance secreto del profe de matemáticas y no pude evitar prestar la oreja. ¡Estaba buenísimo el chisme!"
Pasar un sustico
Se dice cuando algo te asusta un poco, pero no es para tanto, como cuando ves una cucaracha voladora pasar cerca.
"Anoche, en el barrio, tronaron unos cohetes y todos pasamos un sustico pensando que era otra cosa. ¡Menudo susto nos llevamos!"
Estar como una noria
Se le suelta a alguien cuando está mareado, aturdido o más perdido que un pulpo en un garaje. Va dando vueltas con la cabeza, repite cosas, se confunde y no aterriza, como una noria que no para de girar. En Bolívar también cae perfecto después de tragos o trasnocho. Suena regaño, pero con vacile.
"Te tomaste media botella de aguardiente y ahora no encuentras ni la puerta. Estás como una noria, parcero, siéntate un ratico y toma agüita."
Reventón
Tremenda fiesta o jolgorio donde se arma una gozadera que ni el mismísimo Diomedes Díaz podría resistir.
"Anoche hubo un reventón en Playa Blanca, y terminó todo el mundo cantando vallenato con los pies en la arena."
Desayunadito
Forma cariñosa para hablar de un desayuno pequeño, rápido y sin mucha ceremonia, lo justo para que el cocotero despierte y no te desmayes en el bus. En Bolívar se usa cuando no hay tiempo para arepa con todo, pero igual toca meter algo al buche. Y la verdad, a veces sabe mejor que el banquete completo.
"Parce, anoche me acosté tardísimo y hoy solo me alcanzó pa' un desayunadito con café cerrero y pan de bono, y salí volando pa'l camello antes de que el jefe se emberracara."
Echar leña al fuego
Se usa cuando alguien mete más cizaña en un problema en vez de ayudar a calmarlo. Es como ver que todo está ardiendo y aun así seguir soplando para que prenda más. Aplica para el que chismea, el que provoca o el que suelta comentarios venenosos cuando todo el mundo ya está medio emberracado.
"Parce, ya mi mamá y mi hermana estaban agarradas y llega mi tía con el chisme completo a echarle leña al fuego, y terminamos todos gritándonos en la sala como novela barata."
Estar asado
En la Costa Caribe se dice que alguien está asado cuando está furioso, reventado de la rabia o con un mal genio que ni se le puede hablar. Es como estar que echa humo, listo para explotar por cualquier cosa. Suena gracioso, pero cuando alguien está asado de verdad mejor darle espacio y no joder mucho.
"Hermano, al Chucho le rayaron la moto y quedó tan asado que salió a la calle a gritarle hasta al perro del vecino, todo el barrio se enteró del show."
Darle al coco
Se usa cuando alguien está pensando un montón, dándole vueltas a un tema hasta cansarse. Es como exprimir el cerebro buscando una idea, una solución o recordando algo que no te llega. A veces suena medio dramático, como si pensar tanto fuera deporte extremo, pero la verdad es que todos vivimos dándole al coco diario.
"Parce, llevo toda la noche dándole al coco a ver cómo hago pa' pagar el arriendo, la universidad y todavía invitar a alguien a una pola."
Echar carro
En la Costa, sobre todo por Bolívar, se usa para decir que alguien está mamando gallo, vacilando o echando chistes para relajar el ambiente. Puede ser una burla suave, sin mala leche, más de recocha que de pelea. Si te dicen que estás echando carro, es que estás en plan joda y no te están tomando muy en serio.
"Oye, deja de echar carro en la reunión, que el jefe está serio y después nos toca quedarnos hasta tarde por tu recocha."