Gasto / gastadero
Se dice en joda cuando sabés que te vas a patinar plata sin control, ya sea en algo divertido o en una boludez totalmente innecesaria. Es ese momento en que la billetera llora, pero vos igual le das para adelante porque pinta. Puede sonar a queja, pero casi siempre viene con orgullo y risas.
"Che, anoche fue un gastadero mal en el asado con los pibes, entre la carne, el fernet y el hielo. Hoy miro la cuenta y me agarra un mini infarto."
¡Qué rancio!
Se usa para señalar a alguien tacaño, mezquino o que se guarda todo hasta el último centavo. También aplica cuando una persona es amarrete con favores, buena onda o gestos mínimos. Es muy de San Luis decirlo cuando te clavan una excusa barata y te dejan pagando. Y hay que admitir que suena hermoso cuando lo tirás con bronca.
"Le invité una birra al Juani y cuando le tocaba pagar se hizo el que no encontraba la billetera. Qué rancio, si tiene más guita que el banco de San Luis."
Andar como gaviota
Se dice de alguien que anda medio colgado, como flotando por la vida, sin rumbo fijo y con la cabeza en cualquier lado menos donde tiene que estar. Es esa persona que va por la calle y ni registra quién lo saluda. Y hay que admitir que la imagen de la gaviota medio perdida tiene su gracia.
"Mirá a Juanito, desde que cortó con la novia anda como gaviota, se olvida de todo, llega tarde a todos lados y vive colgado en otra galaxia."
Microondasito
Se usa en plan cariñoso o medio en broma para hablar de alguien que se calienta al toque, que pasa de tranquilo a furia en dos segundos. También puede usarse para cosas que se hacen rapidísimo, como comida instantánea o planes armados al vuelo. Es de esas palabras tiernas pero que igual te tiran una verdad incómoda.
"No le tires bardo a Pepe por el partido, boludo, que es un microondasito y en dos segundos está puteando a todo el plantel y apagando la tele de los nervios."
Andar al pedo
Expresión usada cuando no estás haciendo nada en particular, pero te las ingenias para matar el tiempo sin preocupaciones ni obligaciones apremiantes.
"—¿Qué andás haciendo? —Nah, acá ando al pedo, viendo si cae algo interesante."
Amiga ganchuda
Se usa para hablar con cariño de esa amiga que tiene un imán para conseguir cosas sin pagar, favores imposibles o beneficios de la nada. Es como si tuviera un gancho invisible para enganchar oportunidades y regalos. No es insulto, al contrario, suele decirse con admiración y un poco de envidia sana, porque la tipa es una genia.
"Fuimos al boliche sin un mango y mi amiga ganchuda terminó sacando tragos gratis, entrada VIP y hasta taxi de onda, yo ya ni me sorprendo de sus poderes."
Echarse para atrás
Es cuando alguien decide no seguir con lo que había prometido, cancelando planes o compromisos de repente.
"Íbamos a salir al boliche, pero el Nacho se echó para atrás y ahora toca una noche de Netflix en casa."
¿Qué hongo?
Saludo informal que significa '¿Qué pasa?' o '¿Cómo estás?'. Ideal para romper el hielo entre amigos.
"Oye, che, ¿qué hongo? No te veía desde la última juntada en el boliche. Contame qué tal todo."
Tener la mente en el loro
Se usa cuando alguien está distraído, pensando en cualquier cosa menos en lo que está pasando. Es como estar en otra galaxia.
"Che, Juan, ¿entendiste algo de la clase? Porque yo tenía la mente en el loro todo el tiempo."
Ponerse el sombrero de gaucho
Expresión usada cuando alguien se pone serio y asume una responsabilidad importante, como un gaucho preparándose para una tarea crucial.
"Che, Juan tuvo que ponerse el sombrero de gaucho y encargarse del asado porque los demás no sabían ni prender el fuego. ¡Un verdadero capo!"
Estar para gloria
Se usa cuando algo está tan bueno que parece bendecido por los santos, ya sea comida, una siesta o hasta un beso. Es como decir que está perfecto, que no le cambiarías ni medio detalle. Muy de sobremesa puntana, y hay que admitir que cuando algo está para gloria se te cae la baba mal.
"Boludo, la lasaña que hizo la vieja anoche estaba para gloria, me comí tres platos y quedé tirado en el sillón como foca en la costa."
Andar en fila india
Se usa cuando un grupo de personas camina una detrás de otra, bien pegaditas, como si fueran un trencito humano. Suele pasar en pasillos angostos, senderos de sierra o calles llenas donde no entra ni un alfiler. Es muy gráfica la expresión y da un poco de risa cuando te ves desde afuera.
"Íbamos al centro con los pibes y había tanta gente que terminamos andando en fila india desde la plaza hasta el bar de la esquina, parecía excursión de colegio."
Andar hecho puchero
Se dice de alguien que se siente débil o enfermo, como si lo hubieran dejado al fuego lento demasiado tiempo. Básicamente, estás que no te podés ni levantar.
"Hoy me quedo en la cama, che. Ando hecho puchero y no puedo con mi alma."
Andar como chancha con mono
Se dice cuando alguien está exageradamente feliz, como para ir saltando y haciendo mil locuras.
"Desde que aceptaron a Paula en la universidad, anda como chancha con mono, no para de sonreír y hacer payasadas."
Andar como pan en festejo
Se usa para decir que alguien anda agrandado, re confiado y con el ego por las nubes, porque siente que todo el mundo lo busca y lo quiere cerca. Es como ser el pan calentito en una fiesta de pueblo, que no dura ni dos minutos en la mesa. Y la verdad, a veces da un poco de risa verlo tan creído.
"Desde que lo ascendieron en el laburo, el tipo anda como pan en festejo, entra a la oficina saludando a todos como si fuera el intendente del pueblo."
Sangre turrón
Expresión que describe a alguien extremadamente susceptible y melindroso, que se ofende por cualquier comentario. Se dice que la sangre de esta persona nunca coaguló del todo bien.
"¡Dejá de hacerte el sangre turrón, loco! Solo te dijimos que manejás como mi abuela."
Andar con el martillo
Se usa para decir que alguien está tan mamado que camina pesado, torcido y a los tumbos, como si cada paso fuera un mazazo al piso. Es el típico borracho que hace ruido, tropieza con todo y parece que va a demoler la vereda. Es una forma graciosa de describir un pedo monumental, aunque da un poco de pena también.
"Anoche el Negro salió del boliche andando con el martillo, se llevó por delante un tacho de basura, saludó a un árbol y juraba que el cordón de la vereda lo quería pelear."
Andar bien perchu
Se usa para decir que alguien va muy bien vestido, prolijo y con toda la facha, como para que todo el mundo lo mire con un poco de envidia. Es ese que aparece con ropa nueva, perfumito caro y cara de que la está rompiendo. Es bastante típica de San Luis y alrededores, y hay que admitir que suena muy simpática.
"¿Lo viste al Martín? Desde que entró a laburar en la financiera anda bien perchu por el centro, con camisa planchada, zapatitos brillosos y cara de que ya no conoce a nadie."
Muraleada
En San Luis se usa muraleada para hablar de una charla larguísima y llena de detalles, donde la otra persona te cuenta todo con tanta precisión que parece que te está pintando un mural con palabras. Es cuando alguien se cuelga mal explicando algo y vos terminás sabiendo hasta el color de las baldosas. Y hay que admitir que a veces entretiene.
"Che, el Nico me pegó una muraleada sobre su viaje a Brasil que terminé sabiendo hasta qué olor tenía el repelente que se llevó en la valija."
Ser un caso
Se le dice a alguien que es rarito, que siempre hace alguna, que vive en su mundo o que no caza una y te deja pagando. No siempre es “loco” de verdad, más bien es ese personaje que no encaja ni a palos y te saca una anécdota por día. Medio tierno, medio desesperante.
"Mirá a Juan, cayó al asado con ojotas y un paraguas porque “pintó”. No entiende nada y encima se ríe solo. Ese pibe es un caso, posta."
Gigante
En San Luis decir que algo es gigante no va de tamaño, va de lo zarpado que está. Es para lo que te vuela la peluca, lo que se pasa de bueno, como decir que es el Messi de las empanadas, del asado o de la birra bien fría. Es elogio puro, de esos que se dicen con una sonrisa y la panza llena.
"Amigo, el asado que hizo el Facu anoche fue gigante, todavía tengo el gustito del vacío en la boca y eso que ya me clavé dos mates y media docena de tortitas puntanas."
Mandarse un cuento
Decir algo que suena más a fantasía que a realidad, cuando alguien exagera o inventa una historia.
"No te fíes del Pepe, siempre se manda unos cuentos increíbles. Ayer dijo que atrapó un pez tan grande como la mesa del comedor."
Meter caña
Darle mucha energía o intensidad a algo, ya sea un trabajo, una fiesta o hasta regañar a alguien. ¡A tope de power!
"Mirá, loco, el profe nos metió caña todo el semestre y ahora somos unos cracks en mate."
Andar de cabo
Se dice de alguien que anda medio perdido, despistado o sin rumbo, como dando vueltas sin saber bien qué hacer. También puede sonar a que está colgado, lento para reaccionar o que no caza una. Es bien de charla cotidiana, para cargar a un amigo sin mala leche cuando está en cualquiera.
"Mirá al Toño, anda de cabo desde ayer, se bajó tres energizantes y ahora no encuentra ni la puerta del kiosco, qué personaje."
Rojo furioso
Se dice cuando alguien se pone pero que arde de la bronca, de esos enfados que te suben a la cara y te dejan colorado. Es como estar a punto de explotar, ya sea por una promesa incumplida, una cagada ajena o una injusticia. En San Luis suena bien gráfico y bastante teatral, la verdad.
"El loco juró que caía a ayudar con la mudanza y se borró. Mi viejo se puso rojo furioso, empezó a putear bajito y a revolear cajas como si nada."
Ponerse bien yodo
Se dice cuando alguien se emborracha fuerte, pero fuerte de verdad, hasta quedar hecho un desastre y sin filtro. La idea es que el yodo mancha todo y no sale fácil, igual que una noche de alcohol que te deja recuerdos turbios y ropa arruinada. Es una forma medio poética de decir que te pasaste tres pueblos con el escabio.
"Boludo, el Nando se puso bien yodo en la fiesta, terminó cantando chamamé arriba de la mesa y abrazando al perro del vecino como si fuera su ex."
Tía Lola
Forma en que los potosinos llaman a alguien que siempre tiene una historia rara o divertida sobre todo lo que pasa, como la clásica tía que se sabe todos los chismes.
"Ayer vi a Juanita contando historias de extraterrestres otra vez, es nuestra Tía Lola del grupo."
Zancadón
Se dice cuando alguien pega una zancada enorme, literal, o cuando avanza a lo bestia en algo, como si fuera a pasos largos en la vida. Puede ser elogio con envidia sana o una cargada amistosa para el que siempre va a mil. Suena bien cuyano y medio exagerado, de esos que pintan la escena al toque.
"Mirá al Nico, mete un zancadón y ya se recibió, y nosotros acá, re tranqui, clavados con el mate y la fiaca en la plaza."
Estar como tuna
Se usa cuando alguien está muy bien vestido, arreglado y llamando la atención, sobre todo para una salida especial o una fiesta del pueblo. La idea es que la persona está impecable, lista para lucirse y levantar miradas. Es un piropo bien de barrio, medio picaresco, y hay que admitir que tiene bastante gracia cuando se dice con tono cómplice.
"Mirá a la Nati con ese vestido rojo y los tacos nuevos, está como tuna para ir al baile y dejar a medio San Luis con la boca abierta"
Tener una tormenta en el mate
Se usa para decir que alguien está todo confundido o tiene líos mentales, como si tuviera un vendaval dentro de su cabeza.
"¡Che! ¿Viste a Juan? Andaba por la plaza hablando solo, tiene una tormenta en el mate tremenda desde que cortó con la Mari."
Pintarle un mural
Expresión utilizada cuando alguien quiere hacerle un cumplido grandioso a otra persona, a tal nivel que se merecería hasta una obra de arte.
"Cuando vi a Laura en la fiesta con ese vestido rojo, pensé: 'A esta chica hay que pintarle un mural'."
Meterle duro al tizo
Frase que usan los pibes de San Luis para darle caña a estudiar, especialmente cuando se viene un examen jodido.
"Che, bro, este finde no salgo de joda, tengo que meterle duro al tizo porque la profe no perdona ni una."
Darse un rol
Ir a dar una vuelta para desconectar, despejar la mente o simplemente pasar el rato sin rumbo fijo.
"Vamos a darnos un rol por el centro, que llevo toda la tarde encerrado y ya necesito aire fresco."
Apañón
Se dice cuando se arma una juntada medio improvisada y, de golpe, todo el mundo se pone la diez: cada quien trae algo para comer o tomar y termina siendo un banquete. Es como un “traé lo que haya” pero en modo épico, con mesas llenas y sobras para rato. Una belleza de caos organizado.
"Caímos con dos gaseosas y una ensalada, y los demás trajeron empanadas, chori y postre. Fue un apañón tremendo, comimos como reyes y quedó para el desayuno."
Andar al cuete
Se dice de alguien que anda sin rumbo, gastando tiempo y energía en tonterías o charlas sin sentido.
"Che, Juan se la pasa andando al cuete con sus amigos en la plaza en vez de estudiar para el examen de mañana."
Andar en la joda
Significa estar de fiesta, desenfrenado, disfrutando a lo grande sin preocupaciones.
"Ayer estábamos en la joda hasta las cinco de la mañana; al final terminó siendo un fiestón salvaje en medio del monte."
Echar camino
Se usa para decir que ya es hora de irse o empezar a moverse, como quien levanta campamento y sale a la ruta. Es muy típica después de una juntada larga, un asado o una mateada eterna, cuando ya no queda ni pan duro. Suena amable, como avisando que la cosa estuvo buena pero ya hay que rajar.
"Che loco, estuvo buenísimo el asado, pero ya se puso fresquito, echamos camino antes de que nos agarre la noche en la ruta"
Echar la cabeza a volar
Se dice cuando te colgás pensando pavadas o dándole mil vueltas a algo hasta quedar en la luna mal. Es ese momento en que estás tan ido que ni registrás lo que pasa alrededor. Muy de estar en clase, en el bondi o en el laburo y quedarte mirando fijo sin ver nada. Y la verdad, a veces viene bien desconectarse así.
"Estábamos en la reunión del laburo y yo, en vez de escuchar al jefe, me puse a echar la cabeza a volar pensando qué haría si me ganara la lotería y me rajara a vivir a la costa con tres perros y un kiosco."
Piedrazo
Se utiliza para describir a alguien que no entiende nada, como si le hubieran dado con una piedra en la cabeza. Perfecto para el amigo que siempre está en las nubes.
"¡Che, Juani! No te enterás de nada, sos un piedrazo, ¡te cuento algo y parecés pintado en la pared!"
Churrigota
Se usa para hablar de un pibe que es un personaje total, medio diablillo pero con mucha chispa. No es malo, solo que vive armando quilombitos divertidos y siempre se las ingenia para sorprender. Es ese nene que te hace renegar pero al mismo tiempo te mata de risa. Y hay que admitir que esos pibes le ponen onda al día.
"Ese churrigota del barrio le ató los cordones entre sí al director en el acto patrio y cuando el tipo casi se cae todos se cagaron de risa, hasta la seño."
Celujuente
Se usa para bardear con cariño a esa persona que vive pegada al celular, como si fuera un órgano más del cuerpo. Siempre está chusmeando redes, sacando fotos, mandando audios eternos o stalkeando a medio mundo. Básicamente, es alguien que no suelta el telefonito ni aunque se esté prendiendo fuego todo alrededor, y da un poco de risa verlo.
"Mirá a Juan, alto celujuente, en el asado no largó el telefonito ni para dar vuelta la carne y casi prende fuego la parrilla por contestar un mensajito."
Milagrillo
Se usa cuando pasa algo que parecía imposible, medio de casualidad y casi por arte de magia. Suele llevar un tono sarcástico, como diciendo que ni el más optimista se lo esperaba. Es como un milagro, pero en versión de andar por casa, medio en broma y con sabor bien puntano, que siempre tiene su gracia.
"Che, después de llegar siempre tarde, hoy el bondi pasó justo cuando llegué a la parada, sin lluvia ni quilombo de tránsito, fue un milagrillo posta."
Hacer puente
Se usa para hablar de cuando enganchás un feriado con el fin de semana y te armás un descansito más largo sin ir a laburar ni ver la oficina ni en figuritas. Básicamente es aprovechar el calendario para rascársela un poco más de lo normal, que la verdad, siempre viene como piña.
"Che, el lunes es feriado, así que hacemos puente desde el viernes, nos rajamos a Potrero y nos clavamos unas birras mirando el atardecer"
Jalar parejo
Expresión usada para motivar al grupo a esforzarse por igual. Es un llamado a dejar la fiaca y remarla todos juntos, como cuando arrastrás el auto descompuesto del amigo.
"Che, dejá de boludear con el celular y vamos a jalar parejo si queremos terminar antes del asado."
Andar con el árbol
Se usa para decir que alguien está re colgado, distraído o en la luna, como si anduviera mirando cualquier cosa menos lo que pasa a su alrededor. Es esa persona que está en su mundo, tarda en reaccionar y parece que vive en cámara lenta. Y la verdad, a veces da un poco de ternura verlo así de perdido.
"Che, Juancito, dejá de andar con el árbol, casi te pasa el bondi por arriba mientras mirabas las nubes como un colgado."
Panza de burro
En San Luis se usa para llamar de forma medio cariñosa medio cargosa a alguien muy lento, pachorriento o que parece que vive en cámara lenta. No es un insulto heavy, pero sí un toque de atención cuando el otro cuelga demasiado. Es de esas expresiones que suenan tiernas y a la vez te dicen espabilá un poco, campeón.
"Che, panza de burro, ¿vas a seguir mirando la carne o la vas a dar vuelta antes de que se haga carbón, hermano?"
Ser un changuito
Se dice de alguien que siempre está pendiente de los demás, metido en todo como un mono curioso.
"Mirá a ese, siempre está preguntando qué hacemos. Es un changuito de primera."
Andar hecho un diez
Se dice de alguien que va muy bien vestido, como salido de una revista de moda. Demasiado cool para estar en San Luis.
"¡Mirá quién viene! El Juancito anda hecho un diez, parece que se fue de compras a la capital."
Ser un chango
Se dice de alguien que es travieso, inquieto o que no para de hacer líos como si fuera un niño. También puede usarse para ese amigo que siempre está buscando hacer algo divertido.
"Ayer nos fuimos al río y Juan se puso a saltar de piedra en piedra, ¡ese tipo es un chango!"
Dar una luna
Se dice cuando alguien se manda una escena y termina haciendo el ridículo, casi siempre sin querer, y encima se vuelve el centro de atención. Es como “hacer un papelón”, pero con ese toque local de San Luis que suena a anécdota asegurada. Ideal para contar cagadas ajenas con cariño y un poco de maldad sana.
"En el cumple, el Nico se resbaló con el hielo y dio una luna frente a todos, quedó re colorado y la banda no paraba de tentarse."