Un personaje callejero, hábil y espabilado. Siempre se las ingenia para salir airoso. Si te descuidas, ya te vendió dos cocos diciéndote que eran piñas.
"Ese tíguere me convenció de comprarle un reloj en el colmado, ahora no sé si marca la hora o el último chisme del barrio."
En Dominicana, un tíguere es esa persona avispada, con mucha calle, que siempre está buscando el rebusque y casi siempre cae de pie. Puede ser medio buscavidas, medio bandido simpático, pero con carisma y labia para salir de líos. No siempre es algo bueno, pero hay que admitir que a veces da envidia cómo se la busca.
"Loco, ese pana es un tíguere de verdad, se quedó sin cuarto el viernes y el domingo estaba en la playa con romo, carne y hasta gasolina prestada."
En RD un tíguere es el pana vivo, astuto y con mucha calle, que siempre está en algún lío pero casi siempre cae parao. No es exactamente un delincuente, pero tampoco es un santo. Sabe buscarse lo suyo, se la busca como sea, y hay que admitir que muchos quisieran tener ese flow.
"Oye, ese tíguere llegó sin un chele el mes pasado y ahora anda rulay en un carro del año, dime tú en qué es que él está."
En Dominicana, un tíguere es un tipo callejero, vivo y buscavidas, de esos que siempre se las ingenian para salir bien parados. Puede ser admiración por lo astuto o una pullita por lo tramposo, según el tono. Vamos, el que se cree más rápido que el tapón de la 27. Y a veces lo es.
"El pana no tenía gato pa' cambiar la goma y lo levantó con un bloque y una tabla. Diache, ese tigüere resuelve lo que sea."
Se refiere a alguien astuto, que sabe buscarse la vida de manera ingeniosa o al margen de la norma. No hay quien lo engañe.
"Ese tíguere te vende un aguacate y te convence de que es oro puro."
En Dominicana un tíguere es el pana que siempre está en lo suyo, vivo, callejero, con maña para resolver y salir ganando. Puede ser simpático y bacano, pero también medio buscón y medio tramposo si hace falta. No es solo astuto, es experto en moverse en la calle y casi siempre cae de pie, lo cual tiene su encanto.
"Loco, ese tíguere llegó sin un peso, habló dos disparates, se coló en la fila y salió del coro con romo, cena y hasta boletería pa’ la playa."