Estar con la guachafita
Se dice cuando alguien anda en plan relajo, haciendo bulla, travesuras o desorden del que da risa, pero sin mala intención. Es como estar de joda suave, molestando y perdiendo el tiempo a gusto. Suele usarse para retar con cariño o para describir un ambiente bien movido. Y sí, a veces termina en regaño.
"Ayer nos quedamos en la plaza hasta tarde y estábamos con la guachafita, riéndonos y molestando, hasta que el sereno apareció y casi nos corre a chancletazos."
Pasao de nota
Se le dice a alguien que se pasa de creído o de agrandado, como si fuera la gran cosa y todo el mundo tuviera que aplaudirle. Va presumiendo, tirando pinta y hablando como estrella, aunque no tenga con qué. Se usa mucho para bajarle los humos a quien se la da de importante. Y sí, pica rico.
"¿Has visto al Jorge con esos lentes y la camisa abierta? Está pasao de nota, camina por la plaza como si lo fueran a entrevistar en la tele."
Anunciarse
En Sucre, anunciarse es aparecer justo cuando la cosa se pone buena, como si te hubieran soplado el chisme por WhatsApp. No es que avises, es que te materializas en el momento exacto: cuando ya hay música, comida y la fiesta agarró vuelo. Tiene ese toque de magia callejera que da rabia y risa a la vez.
"El Lucho no vino a ayudar ni a armar nada, pero se anunció cuando ya estaban sirviendo y la banda empezó con la tambora, bien campante el tipo."
Guaricho
En Sucre, un guaricho es el que va a su bola con la moda y aun así se ve facha. No sigue tendencias, las tuerce a su estilo, con pinta de que se armó el outfit en cinco minutos y le salió perfecto. Suele ir bien arreglado, con accesorios llamativos y actitud de pasarela por la plaza. Y sí, se nota.
"Mirá a ese guaricho, hoy cayó con guayabera, lentes oscuros y anillos hasta en el meñique. Dice que no copia a nadie, pero medio Sucre ya lo está imitando."
Echar un pie
En Sucre se usa para decir que te vas a bailar, normalmente en plan fiesta, peña y buen ambiente. Es como soltar un: vamos a mover el esqueleto y a sudar la camiseta, aunque sea con dos pasos torpes. No implica hacerlo perfecto, solo pasarlo bien y darle duro a la pista.
"Hoy es viernes, pues de una: nos vamos a echar un pie al centro y si suena cumbia no responde nadie, mañana amanecemos sin voz."
Chocar de risa
Se dice cuando alguien se ríe tan fuerte y por tanto rato que ya no coordina, se queda sin aire y parece que el cerebro se le reinicia. Es como si las carcajadas le hicieran corto circuito y lo dejaran doblado, con lágrimas y todo. Muy de contar después de un chiste malo que pegó durísimo.
"En la sobremesa, el Juancho chocó de risa con el chiste del compadre y casi se va al suelo desde la hamaca, llorando y sin poder hablar."
Chupantablas
Se le dice a la persona que no se pierde ni una fiesta. Ese personaje que aparece en todos los cumpleaños, bautizos y kermeses, siempre pegado a la música y a la pista, como si le pagaran por animar. Suele ser fiestero nivel leyenda y, aunque a veces cansa, también le pone sabor al ambiente.
"Ernesto es un chupantablas de cuidado, ayer cayó a la fiesta sin invitación y terminó bailando cumbia con la tía, el vecino y hasta con el perro."
Oigo, mas no escucho
Frase para decir que sí, que estás oyendo el ruido o las palabras, pero que no estás prestando atención de verdad. Se usa cuando te hablan de algo que te da igual, te aburre o estás en otra. Queda medio educada, pero tiene su veneno pasivo agresivo, como diciendo: ajá, sigue nomás.
"Mi tía metida en chismes del barrio y yo viendo el partido con el volumen a full. Me pregunta si entendí y yo: oigo, mas no escucho."
Ñapa
En Sucre, pedir ñapa es pedir el yapa, ese extra que te dan por comprar: un poquito más de producto, un regalito o un detalle para que te vayas contento. Se usa mucho en mercados y tienditas, sobre todo cuando ya hay confianza con el casero. No es limosna, es tradición y negociación con sonrisa.
"Me llevé dos libras de tomate y le solté al casero: ya pues, no seas duro, regalame la ñapita que hoy estoy corto."
Estar en la papa
Se dice cuando alguien está en su mejor momento, con plata, con suerte o con todo saliéndole redondo. Es como estar en la cima, en la buena, con el viento a favor. En Sucre se usa para marcar que alguien ya la hizo, aunque sea por un laburo nuevo, un negocio o pura rachita.
"Desde que entró a la pega en la alcaldía, el Juan está en la papa, ya no toma micro y ahora se cree influencer viajando cada finde."
Estar en el jardín
Se dice cuando alguien está despistado, colgado o en modo soñando despierto, como si la cabeza se le hubiera ido a pasear y el cuerpo se quedara aquí. Vamos, que no está pillando ni una y toca traerlo de vuelta a la realidad. Suena regañón, pero también tiene su puntito gracioso.
"¡Ya pues, Juanito! Dejá de estar en el jardín y ponete a ayudar, que el profe ya viene y nosotros ni empezamos."
Carrito loco
En Sucre, se refiere a un coche destartalado que, a pesar de su estado, sigue funcionando y acompañando al dueño en todas sus aventuras.
"¡Ese carrito loco ha subido más cerros que yo y sigue dando pelea!"
Estar como una papaya madura
Se dice cuando alguien está demasiado dispuesto, regalado o con unas ganas que se le notan a kilómetros, sobre todo en plan ligoteo. Es como estar en su punto, blandito y listo para que pase algo. Puede sonar medio pícaro y un pelín burlón, porque implica cero disimulo. Y sí, la imagen es bastante gráfica.
"Mira a Juan con Carmen, ni se esconde. Está como una papaya madura, ya hasta la tía del kiosco se dio cuenta y se está riendo."
Salir espejito
En Sucre se suelta cuando algo te sale redondito y te queda de lujo: un plan, un negocio, un examen, lo que sea. Es como decir que te salió perfecto, que la rompiste sin despeinarte. Tiene ese toque de orgullo sano, de mirarte y decir: hoy sí que me lucí, qué nivel.
"Me puse a hacer empanadas sin receta y se vendieron todas en media hora. Hoy sí, me salió espejito y hasta me pidieron para mañana."
Hacerle el tumbe
En Sucre se dice cuando a alguien le hacen una jugada medio mañosa: lo engañan, lo estafan o le arman una trampa con viveza para sacarle plata, ventaja o dejarlo pagando. No siempre es un crimen de película, a veces es pura picardía pesada. Si te lo hacen, te quedas con cara de ¿en serio?
"Le hicieron el tumbe al Mario con la rifa trucha y ahora anda caliente, buscando al vivo que cobró la plata y se hizo humo por el mercado."
Pelearse un dulce
Se dice cuando alguien está en modo intenso intentando ganarse a otra persona, haciendo el ridículo o esforzándose de más para impresionar. Es como competir por el último dulce del planeta, con tal de quedar bien y llevarse el premio. Suele sonar a desesperadito, pero también da risa cuando se nota demasiado.
"Desde que llegó Luisa, Juan anda peleándose un dulce para impresionarla, se puso a bailar cumbia en la mesa y hasta se tiró a la piscina con ropa."
Pillar vista
Se usa cuando ves algo justo en el momento clave, casi por accidente, y te quedas con la escena completa sin filtro. Es como cazar una primicia en vivo, ya sea un chisme sabroso, una metida de pata o cualquier situación que nadie quería que vieras. Y hay que admitir que tiene su punto morboso y divertido.
"Estaba comprando salteñas en el mercado y pillé vista a mi profe bailando reguetón en plena tarima con el director, todo el mundo cagado de risa alrededor."
Hacer la noria
Se dice cuando alguien está dando vueltas y vueltas sin avanzar, como una noria que gira pero no se mueve del sitio. Vale para el que divaga hablando, el que se distrae con cualquier cosa o el que se enreda y no concreta nada. Vamos, mucho mareo y cero resultados. Y sí, desespera un poquito.
"Ajá, pana, ¿vas a arrancar con la tarea o vas a seguir haciendo la noria, hablando de todo y sin terminar ni una?"
Pan de vida
Se le dice, con cariño y un toque de burla, a esa persona que siempre aparece justo cuando hay plan, comida gratis o alguien necesita “una mano”. Es el que nunca falta en el asado, en la vaca o en la emergencia, como si tuviera radar. Suena medio halago, medio pulla, y por eso da risa.
"¿Ya llegó el Pedro? Ese man es pan de vida, oye, huele asado a tres cuadras y cae de una, nunca falta cuando hay vaca."
Truco sucrense
Se dice cuando alguien se saca de la manga una jugada medio sospechosa o una maña poco ortodoxa para salir bien parado. No siempre es ilegal, pero huele a viveza, a atajo y a picardía. Vamos, que la cosa no fue tan limpia como la cuentan, pero igual le funcionó.
"Ese Pedro no estudió nada y aun así aprobó con 80. Ya pues, fijo metió algún truco sucrense para zafarse del examen."
Arrancar el tren
Se usa cuando toca empezar algo con ganas, como meter primera y salir disparado. Es arrancar una tarea o actividad con toda la energía, sin flojera ni excusas. Suena a que el grupo se pone las pilas a la vez, como si fueran vagones enganchados. Y la verdad, da hasta motivación solo de decirlo bien fuerte.
"Ya pues, changos, dejemos de pajear y vamos a arrancar el tren con este trabajo antes de que el profe nos haga puré en la defensa"
Estar en hielo
Se usa cuando a alguien lo tienen totalmente ignorado, castigado o apartado del grupo, como si lo hubieran metido al congelador social. Puede ser por un chisme, una metida de pata o simplemente porque cayó mal. La persona queda fría, sin atención ni cariño, y la verdad es que duele bastante aunque a veces se lo tenga bien merecido.
"Desde que se fue de lengua en la fiesta, tienen al pobre Julián en hielo, nadie lo invita a nada y sus mensajes quedan más vistos que propaganda política."
Carnúo
Se le dice a alguien que es un descarado de campeonato, con más cara que espalda. Es el típico que se aprovecha, se hace el vivo y actúa como si nada, aunque todo el mundo lo esté mirando. Va muy pegado a la idea de sinvergüenza, pero con ese toque local que lo deja bien retratado.
"Ese man es un carnúo, se metió en la fila del súper y todavía se enojó cuando le dijeron algo, como si fuera el jefe del barrio."
Esa es la candela
Se suelta para decir que algo está en su punto, que es lo que está pegando fuerte y todo el mundo comenta. Puede ser una canción, una fiesta, un chisme o hasta un plan improvisado que salió brutal. Es como decir: esto es lo más, esto es lo que prende. Y sí, suena a calorcito sabroso.
"¿Viste el video nuevo que subió el Luisito? Está re bueno, pues. Esa es la candela, compadre, ya lo están pasando en todos lados."
Estar en la luna
Se usa para decir que alguien está súper despistado, colgado en su mundo, pensando en vaya a saber qué y sin pescar nada de lo que pasa a su alrededor. Es como si el tipo estuviera orbitando por el espacio mientras todos los demás siguen en la Tierra. Y hay que admitir que a veces es hasta tierno ver a la gente así de ida.
"Che, Carlos, estás en la luna, hermano, te hablo hace media hora para ver si te prendes a la pichanga de esta tarde y ni reaccionas, parecés antena apagada."
Armar el puño
Expresión local para decir que se junta la banda para beber, charlar y armar desmadre sano. Es como convocar a la tropa para ponerse al día, rajar un poco de todo y pasarla bomba. No es solo tomar, también es chisme, risas y alguna anécdota que siempre se exagera más de la cuenta.
"Esta noche armamos el puño en mi casa con la gente del barrio, traigan chelas, guitarra y hasta al vecino chismoso, que la farra se va a poner brutal."
Vaporizao
En Sucre se dice vaporizao para hablar de alguien que está perdidísimo, con la cabeza en otro lado, como si el cerebro se le hubiera evaporado. Sirve para el que no entiende nada, está en la luna o anda medio atontado después de una noche intensa. Es una forma divertida de decir que alguien no está procesando bien las cosas.
"Che, el Carlos ha venido a la U sin mochila, sin cuadernos y sin idea del examen, está más vaporizao que wifi de plaza en domingo"
irse en una josefina
Se dice cuando te sale un plan improvisado, medio sin pensar, y al final termina siendo una aventura inesperada y buenísima. Es ese típico vamos un ratito y acabas metido en un lío divertido, con anécdota incluida. Suena muy de calle y se usa para darle gracia a la espontaneidad.
"Íbamos a comprar pan y nos fuimos en una josefina, acabamos en el malecón comiendo anticuchos y bailando con unos desconocidos."
Mecha corta
Se usa para describir a alguien que se calienta rapidísimo, que explota por cualquier cosa y arma lío con la mínima provocación. Es como decir que tiene cero paciencia y un carácter bien volátil. Mejor andarse con cuidado con un mecha corta, porque saltan más rápido que petardo en fiesta patronal.
"No le digas nada a la Vale de la apuesta, anda mecha corta desde que el Sucre FC perdió y capaz te arma bardo en plena plaza."
Roerse las patas
Se dice cuando estás aburridísimo, sin plan, sin gente y sin nada que hacer. Es ese ocio pesado en el que ya no sabes ni qué inventarte y acabas dando vueltas como pollo sin cabeza. La gracia es exagerar, como si de tanto esperar te fueras a roer hasta las patas. Muy de estar tirado.
"Desde que se acabó la serie, estoy en casa roíéndome las patas, mirando el techo y esperando que alguien diga: vamos a dar una vuelta, pues."
Sacar piquete
Se dice cuando alguien presume o alardea de algo, sobre todo si es nuevo, caro o está de moda. Es el típico que no puede tener algo sin enseñarlo a todo el mundo, como si estuviera en pasarela. Muy de fiesta y de calle, y a veces va con un puntito de burla.
"Se compró zapatillas nuevas y llegó a la rumba levantando el pantalón para que se las vieran, puro sacar piquete toda la noche."
Suma tela
Expresión sucrense para empujar a alguien a que se anime y se mande sin tanta vuelta. Es como decir “dale nomás”, “con confianza” o “no seas tímido”. Se suelta cuando ves a alguien dudando, medio frío o con miedo al qué dirán. Sirve para levantar el ánimo y apurar la decisión.
"¿Vas a seguir mirándola desde la esquina? Andá pues, invitala a bailar y dejá la vergüenza, suma tela de una."
Feliz como lombriz
Se dice cuando alguien está contentísimo, en plan felicidad simple y sin complicaciones, como si con cualquier cosita ya estuviera celebrando. Es una forma graciosa de exagerar lo bien que te sientes, a veces por una tontería que igual te alegró el día. Suena bien de calle y queda simpática.
"Cuando dijeron que había segunda ronda de arepas y encima con ají, quedamos felices como lombriz, bailando en la cocina y todo, pues."
Tirar el palo
Se usa cuando alguien está intentando ligar con otra persona a punta de indirectas, mensajitos o comentarios medio coquetos, como tanteando el terreno. Es como lanzar un palo a ver si el perro lo trae de vuelta, pero en versión romántica. A veces funciona de lujo y a veces solo quedas haciendo el ridículo, pero igual se intenta.
"Mirá a José en la fiesta, anda tirando el palo a Mariela desde que llegó, le invita tragos, le tira chistes y hasta se ha puesto a bailar cumbia solo para llamar su atención."
Yeya
Se le dice a alguien que va demasiado producido o con ropa llamativa y medio pasada de moda, como queriendo destacar a toda costa. Puede sonar a burla cariñosa o a crítica, según el tono. Es ese look entre carnaval y ropero de la tía, que te hace voltear a mirar aunque sea por curiosidad.
"Mirá a la Carmen, tan yeya como siempre, con ese vestido amarillo chillón y lentes gigantes, parece que se va directo al corso del barrio."
quedao
Se le dice a alguien que es un despistado de campeonato, que vive en la luna y se le pasan cosas obvias. También puede sonar a que la persona es medio lenta para reaccionar o se queda colgada en mitad de la conversación. No siempre es insulto fuerte, pero sí es vacile con cariño o con mala leche, según el tono.
"Juan es bien quedao, pues, le mandé la ubicación tres veces y cayó al otro lado de la ciudad, encima sin batería."
Echarse la vida
En Sucre se dice cuando te tiras a descansar sin prisa ni culpa, como si el mundo pudiera esperar. Es desconectar, vaguear rico y quedarte ahí un buen rato, sin planes ni estrés. No es dormir necesariamente, es más bien ponerse cómodo y disfrutar el momento. Peligrosa porque te echas la vida y se te va la tarde.
"Ya hice mis vueltas, ahora me echo la vida en la hamaca con mi refresquito y que nadie me venga a molestar, ¿ya?"
Estar azucarado
Cuando alguien está de un humor inusualmente dulce y amable, casi como si se le hubiese olvidado ser gruñón.
"Hoy el jefe llegó al trabajo saludando a todos con una sonrisa... ¡parece que amaneció azucarado!"
Estar en rueda
Se dice cuando alguien está metido en la rueda del chisme, o sea, en el corrillo donde se comenta de todo y de todos. Es estar ahí pegado, escuchando, aportando y pasando la bola hasta que el cuento se riega por el barrio. No es precisamente elegante, pero es bien sabroso cuando el chisme está bueno.
"María no apareció en todo el día porque se quedó en rueda con las vecinas, dándole duro al chisme del profe y la señora de la tienda."
Nacío
Se le dice a alguien que llega con una frescura tremenda, bien descarado, como si acabara de nacer y no supiera cómo se hacen las cosas. Es el típico que se mete en la fila, exige trato VIP o habla sin filtro. Suena a regaño con humor, de esos que te bajan a tierra rapidito.
"El man cayó a la casa, abrió la nevera y preguntó si había postre, como si fuera dueño. Todos nos miramos y mi tía soltó: Uy, qué nacío este pues, ni permiso pide."
Mueblear
Verbo bien de calle para cuando alguien se queda ahí plantado, quieto y medio inútil, como si fuera un mueble más del living. No es descansar rico, es estar sin aportar nada, mirando la vida pasar mientras los demás se mueven. Se usa para retar con cariño o con pique, según el tono.
"Ya pues, dejá de mueblear en el sillón y vení a ayudar, que la entrega es hoy y vos ahí como florero, ni te inmutás."
Estar emburria
Se dice de alguien que está metidísimo en lo suyo, tan concentrado que se desconecta del mundo y ni se entera de lo que pasa alrededor. Puede ser por una novela, el cel, el chisme o cualquier cosa que lo tenga absorbido. Vamos, que le hablás y te deja en visto, pero en la vida real.
"No le hablés ahorita a la tía Rosa, está emburria con su novela y ni escucha, vos. Hasta le grité que ya llegó la comida y nada."
Echar un patazo
Se dice cuando te toca pegarte una caminata larga, de esas que no estaban en el plan, pero no queda otra. Es ir a pata hasta lejos, normalmente con cara de flojera y quejándote un poquito, porque el transporte falló o andas sin un peso. Al final llegas, pero con las piernas pidiendo auxilio.
"¿Otra vez al centro? Ya pues, pero en micro no hay, así que toca echar un patazo hasta la plaza y después vemos si alcanzamos para un helado."
Puenteo
Arte maestro de tomarse un fin de semana extendido al juntar días festivos con vacaciones. Los sucreños lo llevan a otro nivel.
"¿Viste que el martes es feriado? ¡Vamos armando un puenteo desde el viernes, compadre!"
Estar en la chicha
Se usa para decir que alguien está medio ido, distraído o colgado, como si su mente estuviera en otro lado. No necesariamente está borracho, pero parece que no conecta bien con la realidad. Es ese estado raro en el que te hablan y respondes cualquier cosa. Y la verdad, a veces hasta hace gracia verlo.
"Oye, hermano, te estoy contando el chisme hace media hora y tú sigues en la chicha mirando la pared, parecés wifi de plaza, te conectás cuando querés."
Sonar como una lata
Se usa para decir que algo o alguien suena fatal, metálico, chillón o súper molesto, como cuando golpeas una lata vacía una y otra vez. Puede ser una voz, un altavoz barato o cualquier ruido cutre que taladra la cabeza. Es una forma medio graciosa de quejarse, pero también puede ir con bastante mala leche si ya estás harto.
"Che, apagá esa radio trucha que tenés en la ventana, loco, que suena como una lata y todo el barrio ya está renegando con tu cumbia distorsionada."
Caerse
En Sucre se usa para decir que te quedaste ido, como en tu mundo, pensando cualquier cosa y desconectando de lo que pasa alrededor. No es que te hayas caído al suelo, es que te caíste mentalmente y dejaste a la gente hablando sola. Pasa mucho en clase, en reuniones y en charlas largas, la verdad.
"Mi hermana me estaba contando el chisme y yo me caí feo pensando si los burros volaran. Me dijo: ¿me estás escuchando o qué?, y yo recién volví."
Gastar tornillos
Se dice cuando alguien está perdiendo el tiempo a lo tonto, dándole vueltas a algo que no va a ningún lado. Como una máquina que hace ruido, se desgasta y al final no produce nada. Va perfecto para cortar el drama, el chisme eterno o la insistencia con alguien que ni te registra. Bien de calle y bien clarita.
"Dejá de gastar tornillos con ese man que ni te para bolas, pues. Mejor nos vamos a rumbear y que se quede con su cuento."
Periquito
En Sucre se usa como apodo cariñoso y medio en broma para un amigo que no para quieto o que habla hasta por los codos. No es insulto serio, más bien una forma de decirle inquieto, metiche o cuentero sin mala leche. Va perfecto para el compa que siempre arma bulla y se inventa cualquier cosa.
"Dejá nomás, ese periquito del Juan ya está contando que se ganó la lotería y ni para el micro tiene. Siempre arma bulla y todos le siguen la cuerda."
Pasarse de guasa
Se usa cuando alguien se pasa con las bromas y ya no hace tanta gracia, porque cruza la línea y puede molestar. Es como decir que se le fue la mano con el chiste y ya no está tan chistoso. A veces hace reír igual, pero uno piensa que en cualquier momento se arma el lío.
"Che, el Javi ya se pasó de guasa imitando al director en plena clase, en una de esas lo pillan y lo botan del curso de una patada."